Esta patología ocurre cuando se lesiona el cartílago de las articulaciones que conforman la columna vertebral.
Las regiones que más frecuentemente sufren estas lesiones son el raquis cervical y lumbar ya que la zona dorsal tiene menos movilidad y está protegida por los arcos costales.
La sintomatología principal es el dolor, la rigidez y la limitación de la movilidad. Es un dolor de tipo mecánico es decir que aumenta con el movimiento y las cargas y mejora con el reposo.
El dolor es referido a la región afecta pero también puede presentar irradiación a base de cráneo y brazos cuando afecta a columna cervical y a glúteos y piernas cuando se afecta la región lumbar.
El origen de esta patología es multifactorial y en ella actúan factores predisponentes de tipo genético, posturales, peso corporal, sedentarismo o deportes de alto impacto.
Existen también artrosis secundarias a causas concretas como traumatismo, infección…
La prueba prínceps para su diagnóstico es la radiografía simple y la clínica del paciente.
Únicamente serán necesarios otros estudios más complejos (RMN, TAC) para descartar otras patologías asociadas.
El tratamiento básico consiste en limitar los factores predisponentes (peso corporal, ejercicio, corrección postural).
Se debe hacer un enfoque farmacológico para paliar el dolor. La fisioterapia es importante como técnica adyuvante contra el dolor.
En casos avanzados, inestabilidad o compresión neurológica será necesaria la cirugía.
Dra. África del Pino
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Dra. África del Pino Traumatología y Cirugía Ortopédica